









Si les digo los nombres de Hawley Pratt o de Robert Dawson, ¿les suenan de algo? Seguro que no; pues el primero diseñó, junto a Friz Freleng y David H. DePatie, nada más y nada menos que a la Pantera Rosa y el segundo diseñó los magníficos créditos iniciales de "Eduardo Manostijeras" (Tim Burton, 1990). Quizá, si les hablo de Maurice Binder, ya les suene algo, ¿no? Bueno, quizá tampoco, pero se trata del creador de los créditos de las películas de James Bond y de dos memorables films de Stanley Donen: "Charada" (1963) y "Dos en la carretera" ( 1967).
Eso sí, estoy convencido de que el nombre de Saul Bass al menos les sonará porque el currículum de este genio del diseño es impresionante y la influencia de su inconfundible estilo minimalista aún se hace notar hoy en día (no hay más que ver los diseños de Juan Gatti para Almodóvar). Rememorar la lista de películas en las que intervino este gran hombre de cine da vértigo, nunca mejor dicho: "El hombre del brazo de oro" (Otto Preminger, 1955), "Saint Joan" (Ídem, 1957), "Anatomía de un asesinato" (Ídem, 1959), "Spartaco" (Stanley Kubrick, 1960), "Vertigo" (Alfred Hitchcock, 1958), "Con la muerte en los talones" (Ídem, 1959), "Psicosis" (Ídem, 1960), "West Side Story" (Robert Wise, 1961).
Esa fue su época dorada. Luego, iría espaciando sus colaboraciones al ser llamado por direcctores fans de su trabajo. En ese aspecto cabe destacar a Martin Scorsese, quien le llamó para "Uno de los nuestros" (1990), "El cabo del miedo" (1991), "La edad de la inocencia" (1991) y "Casino" (1995), con los magníficos resultados que todos podemos disfrutar. Murió en 1996, pero creo que nadie se va a acordar del décimo aniversario de su muerte salvo unos pocos incondicionales.
También es muy importante la aportación de la música para que las secuencias de créditos funcionen y en ese aspecto es llamativo ver como se repiten los nombres de Henry Mancini, Bernard Herrmann, John Williams o Danny Elfman como compositores de la BSO, así que como los directores para los que trabajan: Blake Edwards, Stanley Donen, Otto Preminger, Alfred Hitchcok, Steven Spielberg o Tim Burton. No es nada casual que los directores más visuales sean los que más importancia dan a los créditos y a la BSO. Hay mucha tela que cortar sobre esto, pero no quiero dispersarme. La pena es que luego la gente los olvida, pero aquí vamos a intentar rememorar algunos de esos pequeños-grandes momentos de cine. Aquí está la lista de los que considero más significativos:
1. SED DE MAL (ORSON WELLES, 1958)
Vale, es un topicazo, pero es que a veces los tópicos son ciertos. No es solo el maravilloso plano secuencia, sino la preciosa música de Henry Mancini, el decorado y la atmósfera de puro Cine Negro.
2. LA PANTERA ROSA (BLAKE EDWARDS, 1963)
Haber creado para los títulos de crédito uno de los personajes más entrañables de la historia de la animación les hace merecedores de este segundo puesto. De nuevo Henry Mancini (habría que hacerle un monumento a este hombre) y ese temazo que todo ser humano con oídos ha tatareado alguna vez.
3. JAMES BOND CONTRA EL DR. NO (TERENCE YOUNG, 1962)
Probablemente, la secuencia de créditos más famosa de la historia del cine. Además, si hay una saga que haya cuidado este aspecto, aunque a veces se pasen de horteras, es esta. Por eso creo que merecen este puesto. Ah, y no olvidemos la música de John Barry.
4. PSICOSIS (ALFRED HITCHCOCK, 1960)
De todos los trabajos que hizo Saul Bass para el maestro he elegido este porque me encanta esa idea de descomponer las letras para sugerir de una forma muy sutil la personalidad dislocada del protagonista. Además, colaboró de forma decisiva en la famosa escena del asesinato en la ducha. Y qué decir de la música de Bernard Herrmann, se me acaban los adjetivos.
5. ANATOMÍA DE UN ASESINATO (OTTO PREMINGER, 1959)
Saul Bass tenía que repetir y la verdad es que esta magnífica secuencia podría haber estado perfectamente la primera. La música, nada más y nada menos que del legendario Duke Ellington.
6. EL SENTIDO DE LA VIDA (TERRY JONES Y TERRY GILLIAM, 1983)
No podía faltar Terry Gilliam en esta lista porque sus trabajos de animación de corta y pega para los Monthy Python pertenecen ya a la memoria visual de millones de fans, entre los que me incluyo. Acompañando, como siempre, una divertida canción de Eric Idle.
7. DOS EN LA CARRETERA (STANLEY DONEN, 1967)
De nuevo Maurice Binder y de nuevo una maravillosa música de Henry Mancini. animaciones de estética Pop, que crearon escuela. Algo ya practicado en la igualmente magnífica "Charada" por el mismo equipo.
8. ATRÁPAME, SI PUEDES (STEVEN SPIELBERG, 2002)
Un homenaje a la estética Pop de los 60 realizado con un virtuosismo insultante por el estudio de post-producción Nexus Productions. John Williams completa esta pequeña obra maestra con una extraña melodía que fluye al ritmo de las imágenes y que te deja totalmente fascinado. Filigrana fina.
9. EDUARDO MANOSTIJERAS (TIM BURTON, 1990)
La verdad es que casi todas las secuencias de créditos de las películas de Burton merecerían estar en esta lista. He elegido esta en particular por la música de Danny Elfman y porque me encanta la utilización que se hace de la máquina de fabricar galletas. Anuncia a la perfección el tono del relato entre el cuento de hadas y el terror gótico.
10. RESERVOIR DOGS (QUENTIN TARANTINO, 1992)
Quentin Tarantino también pertenece a ese grupo de directores que cuidan extremedamente la música y la estética de sus obras, por ello merecía figurar en esta lista. Reconocedlo, a todos os habría gustado figurar en esos créditos poniendo cara de matón.
Sé que, como siempre, hay muchos que son, pero no están. Es lo malo de limitar la lista a 10, pero espero vuestras aportaciones.
5 comentarios:
Gran articulo!!! voy a visionarme presto todos esos momentos!!! Además muy bien para ponerse a descubrir con verdadera ilusión el trabajo de Saul Bass y todo lo demás. Vamos a ello poco a poco.
De Saul Bass me enamoró la secuencia inicial de "La vuelta al mundo en 8o días"...muy muy grande.
Últimamente se ha hecho grandes títulos de crédito. Respetando la tradición, pero avanzando en una dirección estética realmete increible. Estoy hablando, por ejemplo, de la secuencia inicial de "El Señor de la Guerra" donde Niccol y Laurent Gillet siguen la trayectoria de una bala desde su fabricación hasta la cabeza de un niño africano. Impresionante.
Saludos.
Oh, por cierto, se me olvidó firmar el comentario anterior, por eso mediante la presente me identifico. Un saludote.
Había leído lo de "El señor de la guerra", pero no la he visto todavía. Desde luego, ese es un buen un aliciente adicional.
Saludos.
Te ha faltado mencionar a Imaginary forces, los de seven
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