15 septiembre, 2011

BALANCE CINEMATOGRÁFICO DEL 2010. PUNTO Y FINAL

Ejem, ya estamos en septiembre del 2011 y yo sigo con el repaso al 2010. Sí, es lamentable, así que he decidido que de hoy no pasa, voy a repasar todas las pelis de una tacada, así que prepárense para un post bastante largo con el que espero que perdonen esta larga ausencia.

LAS REGULERAS
En este grupo he englobado a aquellas pelis que no llegan a ser un bodrio absoluto, pero que me parecen definitivamente fallidas.




SHERLOCK HOLMES (Guy Ritchie)
Como ya dije, no está mal para ser de Guy Ritchie, pero tampoco es para echar cohetes.




NINE (Rob Marshall)
Partiendo del interesante experimento cinematográfico dirigido por Fellini, se queda en una simple reunión de estrellas femeninas dándolo todo. Algunas, como Nicole Kidman o Sofia Loren, ya es bien poquito lo que pueden dar. Las estrellas jóvenes son las que animan un poco la función.




AIRBENDER: EL ÚLTIMO GUERRERO (M. Night Shyamalan)
Es la peor película de Shyamalan, de acuerdo, ¿pero merecía ser recibida con tanta saña?. En absoluto. Sí, el argumento es un poco simple y le falta chispa aventurera, ¿pero no le pasa lo mismo a Avatar? Además, el minimalismo con el que están rodadas las escenas de acción (casi todas en plano secuncia) le otorga un encanto anacrónico que para sí querría el engreído director de ese plagio de Los Pitufos a gran escala.




CARANCHO (Pablo Trapero)
¿Se imaginan un anuncio de la Dirección General de Tráfico que durara 2 horas? Pues ya tienen una idea de lo que es Carancho. Tal acumulación de emociones fuertes comienza impactando, pero termina hartando hasta perder la credibilidad.




TAMARA DREWE (Stephen Frears)
Al menos, hay tres motivos para ver esta película: Gemma Arterton, Gemma Arterton y Gemma Arterton. Bueno, siendo bueno, podría añadir un cuarto: Gemma Arterton. Cuando ella aparece, subidón, y cuando no, bajón. En el fondo es una comedia bastante tontorrona que se las da de inteligente. Pelín repelente, vamos. Para disfrutar de Gemma Arterton en todo su esplendor vean mejor la inédita en España The Disappearence Of Alice Creed.




FLAMENCO, FLAMENCO (Carlos Saura)
Independientemente de la brillantez de algunos números y del indudable talento de todos los artistas flamencos que aparecen, el valor cinematográfico de la propuesta es nulo, pura fórmula. Todo queda como muy mono y falto de la garra que exige este género musical.




BIUTIFUL (Alejandro González Iñárritu)
Ya tengo el título para una futura parodia de esta película y similares: Mugre Movie. Y es que no entiendo ese afán en recrearse en la mierda y el dolor ajeno. Además, el argumento es de lo más sencillo, pero se alarga y alarga a base de subtramas totalmente innecesarias hasta los 145 minutos. Vamos, que Iñárritu es una especie de James Cameron de la miseria.




FISH TANK (Andrea Arnold)
Seguimos en el género Mugre Movie, aunque ésta, más modesta que la de Iñárritu, no se me hizo tan insoportable. Se deja ver sin demasiados sobresaltos y a mí me sirvió para descubrir a un actor prodigioso, Michael Fassbender.

LAS INTERESANTES
En este grupo incluyo aquellas películas en las que reconozco muchos puntos de interés, pero que no me han llegado tanto como para constar entre mis favoritas. Ya vamos llegando al meollo del asunto porque aquí ya empieza a haber grandes películas.




TENIENTE CORRUPTO (Werner Herzog)
Es una relectura en clave cínica del estupendo film de Abel Ferrara. A pesar de las simpatías que me despierta el film, no conseguí conectar con ciertas salidas de tono, que pueden ir muy bien para retratar al politoxicómano protagonista, un estupendo Nicholas Cage en un papel hecho a su medida, pero que a mí me sacaban de situación.




UN TIPO SERIO (Joel & Ethan Coen)
Reconociendo el, casi siempre, espléndido trabajo de realización de los Coen y que se trata de uno de sus films más personales, esta vez no conseguí entrar del todo en su mundo.




RICKY (François Ozon)
Al principio me resistía a verla, pero a pesar de mis problemas para mantenerme despierto hasta el final (en absoluto achacables a la película, sino a que me voy haciendo viejuno) tengo que reconocer que me acabó gustando. Lo estrambótico del argumento y de su plasmación en pantalla no impide la implicación emocional del espectador con los personajes, lo cual tiene un enorme mérito. Es una fábula adulta que funciona.




LA CARRETERA (John Hillcoat)
En un futuro distópico un padre y un hijo luchan por mantener viva la llama de la humanidad, el último gramo de dignidad que les queda. Es un film terrorífico a la vez que entrañable al que puede que le falte un poco más de mordiente cinematográfica. Demasiada corrección, demasiado cálculo.




I'M NOT THERE (Todd Haynes)
No hace falta ser fan de Bob Dylan para disfrutar de este filme en el que Todd Haynes vuelve a dar muestras de su enorme cultura visual y de su talento para capturar la estética de décadas recientes. Para mí resulta algo irregular porque no todas las épocas del retratado resultan igualmente subyugantes. La parte interpretada por Cate Blanchett se lleva la palma gracias a ella, al maravilloso blanco y negro y a que refiere la polémica etapa de electrificación del músico. Richard Gere protagoniza la parte más endeble.




AN EDUCATION (Lone Scherfig)
Película que retrata la iniciación al mundo adulto de una adolescente en el Londres de los años 60. No hacía falta nada más para despertar mi interés. Si a eso le sumamos unas estupendas interpretaciones y una buena ambientación, ya tenemos una buena película. Buena, sí, pero no excepcional, le falta algo más de osadía.




FANTASTIC MR. FOX (Wes Anderson)
Le había perdido un poco la pista a este director, ya que no llegué a conectar con el humor de Academia Rushmore o Los Tenembaum y no vi sus dos siguientes películas. Pero este estupendo film de animación me ha conciliado con él y estoy dispuesto a darle una oportunidad a Life AquaticViaje a Darjeeling.




LA ÚLTIMA ESTACIÓN (Michael Hoffman)
Agradable drama histórico en torno a los últimos días de Leon Tolstoi. Grandes interpretaciones y un original argumento que conjuga política, amor, amistad y literatura.




MI REFUGIO (François Ozon)
Segunda película de Ozon en esta lista, parece que está en buena forma este chico. Es como un homenaje a la maternidad en el que una inmensa Isabelle Carré (sin prótesis, está embarazada de verdad) interpreta   a una mujer que, tras quedarse embarazada, se ve obligada por las adversas circunstancias a iniciar un camino de redención y autoconocimiento.




AIR DOLL (Hirokazu Kore-eda)
Si no fuera por una segunda parte excesivamente dispersa, estaríamos hablando de una de las grandes películas del año. Aún así, el hecho de que Kore-eda extraiga poesía de situaciones tan fantasiosas y sórdidas resulta un logro al alcance de muy pocos que le sitúa entre los grandes directores del mundo. Es como una especie de Pinocho para adultos protagonizado por una muñeca hinchable. Hasta ahí puedo leer.




CONOCERÁS AL HOMBRE DE TUS SUEÑOS (Woody Allen)
Otra gran película del maestro que quizá pase desapercibida por no ser una de esas obras maestras a las que  nos malacostumbró hace años. Con un par de vueltas al guión y una realización más concienzuda podría haberlo conseguido porque el neoyorquino no ha perdido ni un ápice de su sabiduría a la hora de hablarnos de las debilidades humanas.




BRIGHT STAR (Jane Campion)
La directora de El Piano vuelve al terreno que la hizo famosa, el drama histórico-romántico, pero parece que el mundo ya no está para cursiladas porque ésta no ha tenido, ni mucho menos, el éxito de aquella. Atención a la protagonista, Abbie Cornish, a la que se puede ver como una de las chicas guerreras de Sucker Punch (Zach Snyder).




EL AMERICANO (Anton Corbijn)
El director de la también estupenda Control nos ofrece este esteticista thriller por el que pulula el espíritu de Jean Pierre Melville, en el que sigue con precisión los movimientos de un sicario excelentemente interpretado por George Clooney. Es un filme manierista que disfrutarán los cinéfilos, pero al que le falta una historia romántica más solida para acabar de redondear una propuesta tan apetitosa.




EL GRAN VÁZQUEZ (Óscar Aibar)
El director de la interesantísima Platillos Volantes vuelve a demostrar lo bien que se mueve entre extraños personajes reales de la España franquista. De lo mejorcito del cine español del año pasado, también gracias a un Santigo Segura descomunal.




PA NEGRE (Agustí Villaronga)
Justa ganadora, por sorpresa, del Goya a Mejor Película. La pena es que Villaronga ha logrado el mayor éxito de su carrera con su película más impersonal. Solo en la espeluznante escena del caballo cayendo por un precipicio se puede apreciar su talento surrealista.




RUMORES Y MENTIRAS (Will Gluck)
¿Hay inteligencia en la comedia adolescente? Puede que en general no, pero de vez en cuando surgen películas como ésta que consiguen que recuperemos la confianza en ese subgénero tan denostado. Además, sirve para descubrir el inmenso talento y atractivo de Emma Stone. Sus momentos junto a esos padres de película interpretados por Patricia Clarkson y Stanley Tucci son impagables. Después de ver esta película entenderán porqué Jim Carrey ha confesado estar enamorado de la actriz protagonista.




CAZA A LA ESPÍA (Doug Liman)
El director del primer Bourne consigue una película sobre la guerra de Irak mucho más interesante que Green Zone, dirigida por Paul Greengrass, lo cual me reafirma en la idea de que la mejor película de la saga Bourne es la primera y en que el director de las siguientes es uno de los grandes bluffs de la década. Solo me queda añadir que Naomi Watts, como siempre, y Sean Penn (oh, cielos, más contenido que nunca) están estupendos.




THE TOWN (Ben Affleck)
Una vez perdido el efecto sorpresa de Adiós, Pequeña, Adiós, el pequeño de los Affleck sigue demostrando buen pulso para introducirse en el submundo de la delincuencia de extrarradio. Ya estoy esperando su próxima película como director, no me importaría que dejara su carrera de actor.




NEDS (Peter Mullan)
Quizá el primer premio en un gran festival como el de San Sebastian le viene grande, aunque el historial del palmarés de San Sebastian es lamentable, pero es una película que se introduce en el sórdido mundo de la violencia infantil con el respeto y la sabiduría que otorga la experiencia personal. Además, lo hace con una estilizada realización que, como en el caso de Affleck, nos habla de un actor interesado por todos los aspectos del arte cinematográfico, no solo por la interpretación.




BALADA TRISTE DE TROMPETA (Álex De La Iglesia)
Parece como si, después de la insulsa Los Crímenes De Oxford, el director bilbaíno hubiese sentido la necesidad de radicalizar su discurso. Desde luego, lo ha conseguido y eso es loable, pero se le ha ido demasiado la mano. Si tenemos en cuenta que es su primer guión sin la intervención de Jorge Guerricaechevarría, podríamos llegar a la conclusión de que el gracioso del tándem es el tímido guionista más que el megalómano director porque eso es, precisamente, lo que le falta a esta película, afinar el sentido del humor frente a tanto estrambote. Eso sí, contiene una secuencia de créditos admirable y momentos memorables como la secuencia final en la Cruz De Los Caidos (que algo que ves todos los días al ir a trabajar se convierta en escenario de una película impresiona) o ese en el que, tras el asesinato de Carrero Blanco, el payaso interpretado por Carlos Areces se acerca al coche de los terroristas y les pregunta: "¿De qué circo sois vosotros?". Por cierto, durante los actos de acogida a los peregrinos del JMJ en Salamanca viví un momento Álex De La Iglesia. A los responsables pertinentes no se les ocurrió otra cosa que recibir a los jóvenes católicos con un grupo de payasos actuando sobre el escenario montado en la Plaza Mayor. Pobrecillos, les tratan como a niños de 5 años, van a acabar todos traumatizados.




EL DISCURSO DEL REY (Tom Hooper)
Va a pasar a la historia como la película que le robó el Oscar a La Red Social y es una pena porque, de no haber ganado tantos premios inmerecidos, habría quedado como la bonita historia de amistad y de superación personal magníficamente interpretada que es. La película modesta que no molesta a nadie y que genera consenso ha vuelto a triunfar sobre la ambición creativa que genera polémica. Es lo normal, pero no por eso deja de ser indignante. Es una película bonita, con muy buenas interpretaciones y poco más. Lo de que se premie a su director, que lo único interesante que sabe hacer con la cámara es abusar del gran angular, es un chiste de mal gusto.




SCOTT PILGRIM VS. THE WORLD (Edgar Wright)
Otro ejemplo de brillante comedia adolescente, y es que este año ha sido un gran año para el género. La verdad es que esta película arriesga con una estética de videojuego que tira para atrás, pero que finalmente se revela como uno de sus grandes aciertos. Cuando uno conoce a una chica muy popular tiene la sensación de competir contra los fantasmas de sus ex-novios, pero aquí  éstos adquieren la forma de malos de videojuego contra  los que el héroe se debe batir en un duelo mortal. El resultado final es una divertidísima mezcla de musical punk, comedia adolescente y cine fantástico de artes marciales. Michael Cera, el John Cusack de los 2000, interpreta al héroe, que toca el bajo en una banda de rock garajero.




ZOMBIELAND (Ruben Fleischer)
Otra divertidísima comedia fantástico-adolescente que cuenta con la deliciosa Emma Stone en un reparto encabezado por unos estupendos Jesse Eisenberg y Woody Harrelson. Lo de los zombies no es más que una excusa para reunir a un grupo de entrañables personajes marginales obligados a entenderse para superar la adversidad. Atención a uno de los cameos más memorables de la historia del cine, el cual, por supuesto, no voy a desvelar.





LA CINTA BLANCA (Michael Haneke)
Haneke hace una interesante reflexión acerca de las raíces del mal y el totalitarismo, pero resulta demasiado cerebral y algo reduccionista para mi gusto, flaquea en el aspecto emocional. Podría haber sido un gran cuento cruel, si Haneke hubiera optado por ese tono, pero se decide por un realismo (lo ha dicho él mismo, no es una simple apreciación personal) que no le viene del todo bien, ya que da la sensación de estar sermoneando al personal. De haber optado por el género fantástico no habría obtenido el mismo prestigio, pero a veces los géneros son los vehículos más adecuados para hablar de algo muy serio sin que lo parezca. A eso yo lo llamo sutileza, que es una virtud de la que Haneke no puede presumir. Sí puede presumir, sin embargo, de una bellísima factura.




CÓMO ENTRENAR A TU DRAGÓN (Dean DeBlois & Chris Sanders)
Por primera vez en Dreamworks Animation se esfuerzan más en defender un buen guión con una magnífica animación que en hacerse los graciosos a costa de su competidora Disney (véase Shreck). Paradójicamente, al hacer su película más disneyana han conseguido su mejor film hasta la fecha, una gran cinta de aventuras plagada de escenas que quitan el hipo gracias a su apabullante perfección técnica y que incluso llega a emocionar gracias al buen diseño de personajes y a un mensaje, pacifista y ecológico, alejado del cinismo habitual de la casa. No llegan al nivel de Pixar, pero están en el buen camino.




BURIED (Rodrigo Cortés)
El gran director salmantino no solo ha salido airoso del desafío de hacer una película que transcurre de principio a fin en un ataúd, sino que lo hace con nota porque logra que el espectador salga del cine con la sensación de haber asistido a una trepidante cinta de acción y aventuras, que además se permite una reflexión en segundo plano acerca de la indefensión que sufre el hombre moderno, manipulado por fuerzas que es incapaz de controlar. El ataúd no funciona solo como espacio físico, sino también como una metáfora a la que el director se mantiene fiel hasta el final. Chapeau!




EN TIERRA HOSTIL (Kathryn Bigelow)
Esta película no está tan lejos de Le Llaman Bodhi como puede parecer y es que, aunque trate un tema con tanta carga política como la guerra de Irak, la exmujer de James Cameron no puede evitar caer en lo que más le gusta, algo que yo denomino "abstracción testosterónica". ¿Por qué esta definición? Pues porque para esta mujer el tema es lo de menos, lo que a ella le gusta es ver a chicos musculosos enfrentándose a mil peligros, dándose mamporros o disparándose entre sí. Es cine de acción puro y duro, sin tonterías. Eso que debería hacer James Cameron porque es lo único que sabe hacer (nunca ha superado lo logrado en sus dos Terminator y en Aliens), pero que no hace porque se cree Spielberg. Ver a la Bigelow limpiarle el Oscar a Cameron y a su infumable Avatar es uno de esos pequeños placeres que la vida te depara.




TWO LOVERS (James Gray)
El director de La Otra Cara Del Crimen se confirma como uno de los porta antorcha de ese cine norteamericano tan apegado a la realidad como pendiente de una solidez formal labrada a base de décadas de experiencia que tuvo en la llamada generación de la televisión (Sidney Lumet, John Frankenheimer, Arthur Penn, Robert Mulligan, etc.) a sus principales valedores. El peso de la familia es la gran obsesión de este interesantísimo autor a contracorriente del actual Hollywood.




IO SONNO L'AMORE (Luca Guadagnino)
¿Han oído alguna vez la expresión "ausente de cuerpo presente"? Pues algo parecido se puede decir del personaje interpretado por Tilda Swinton al principio del film. Pocas veces se ha expresado tan bien en la pantalla esa sensación de no estar en el mundo, de vivir una vida que no es la tuya. La película cuenta magníficamente el proceso a través del cual una muerta viviente vuelve a tener contacto con el mundo, con las sensaciones que una vida acomodada, pero vacía, le había hecho olvidar. Y lo hace de una forma totalmente visual, nada discursiva, lo cual tiene todavía más mérito.




LOLA MONTES (Max Ophüls)
Recuerdo que sentí una gran decepción al ver hace años Lola Montes en televisión. Esa copia amarillenta, doblada y mutilada no respondía a las expectativas generadas en torno al filme maldito del gran Max Ophüls. Sin embargo, la copia restaurada y digitalizada que tuve ocasión de ver gracias a los Cines Verdi de Madrid hace unos meses no solo responde a las expectativas; sino que las supera. Es una sinfonía de movimientos de cámara en Technicolor y Cinemascope; un ejercicio de estilo en el que el director vienés exhibe su gusto por los relatos episódicos en constante movimiento, aunque en este caso todo gire en torno a la protagonista que da título al filme. Sin ser una película musical, la cámara se comporta como si danzara alrededor de los actores, lo cual, unido a un virtuoso manejo de la escenografía, sumerge al espectador en un placentero estado de ensueño. Usa el circo y el teatro como metáfora de la vida, pero Lola Montes es cine en estado puro: algo que nace como una gran mentira, pero que se hace verdad ante nuestros ojos a 24 fotogramas por segundo. Es una obra maestra que no figura entre mis favoritas del 2010 por el simple hecho de que, al fin y al cabo, se trata de un reestreno.



LAS FAVORITAS
Hay de todo: películas americanas, europeas, asiáticas, bélicas, de cine negro, de autor, de animación, de acción real, estrenos tardíos... Ready, steady, go!




SHUTTER ISLAND (Martin Scorsese)
Puede parecer un paso atrás en la carrera del director de Casino por su ambientación retro y por ser relativamente tramposa, pero a mí me parece una magnífica demostración de que Scorsese se mantiene en plena forma y pendiente de las tendencias del cine moderno, ya que sabe dotar al film de una fuerza simbólica y dramática propia del cine de sus adorados años 50 a la vez que se adentra en el desafío narrativo que implica contar algo desde el punto de vista subjetivo del protagonista. Es una incursión en los traumas de la sociedad estadounidense de postguerra teñida de cine negro clásico.




EL ESCRITOR (Roman Polanski)
Otro film con apariencia de intrascendente que en manos del itinerante director polaco se transforma en una pieza de orfebrería cinematográfica impregnada de la ironía y la mala uva que le caracterizan. El uso de los escenarios, el punto de vista y la profundidad de campo es ejemplar.




CIUDAD DE VIDA Y MUERTE (Lu Chuan)
Cuando pienso en las grandes películas bélicas me doy cuenta de que todas comparten una dualidad que resulta inquietante. Por un lado está el retrato del horror al que es capaz de llegar el ser humano (en esta ocasión uno sale del cine maldiciendo a los japoneses) y por otro la belleza de la factura técnica, como si la violencia inspirase imágenes de una belleza extrema. Hay quien dice que no se puede criticar la violencia y a la vez recrearse en ella, pero yo creo que el arte se debe mover precisamente en ese terreno pantanoso en vez de pisar sobre tierra firme. La guerra extrae lo peor y lo mejor del ser humano, la violencia sobre sus congéneres y la solidaridad de las víctimas ante la adversidad y por eso sigue siendo fuente de inspiración para magníficas películas como ésta.




NAUSICAÄ DEL VALLE DEL VIENTO (Hayao Miyazaki)
Aunque sea con ¡26 años de retraso!, bienvenido sea el estreno en España de este estallido de imaginación orquestado por el maestro japonés. Ojalá sigan cayendo año tras año más películas del Studio Ghibli en los cines españoles. Esta vez la ciencia ficción y el mensaje ecológico marca de la casa confluyen en un espectáculo visual fascinante. Apenas hay diálogos, es el imperio de la imagen.




KICK ASS (Mathew Vaughn)
Este año todo el mundo habla de la resurrección de los X-Men gracias a la estupenda X-Men First Class, pero a los que vimos Kick Ass no nos ha sorprendido nada la energía que su director ha sabido insuflar a una  
franquicia que parecía agotada. Y es que esta película basada en el cómic homónimo guionizado por Mark Millar y dibujado por John Romita Jr. es el ejemplo perfecto de como llevar a la pantalla grande la brillantez visual y el entretenimiento inteligente que proporcionan los mejores cómics. Atención a Chloë Moretz, que está enorme en uno de los personajes infantiles más potentes de la historia del cine.




ORIGEN (Christopher Nolan)
Pocos directores en la historia del cine pueden presumir de la coherencia que atesora el director de origen británico en sus proyectos más personales, los alejados de Batman. Desde la balbuciente Following hasta la brillante Origen, pasando por las magistrales Memento y The Prestige, Christopher Nolan, con la inestimable colaboración de su hermano Jonathan en los guiones, ha ido conformando una obra en la que ha sabido fusionar con sutileza su pasión por el arte cinematográfico con la base temática de sus películas. ¿Qué son éstas sino metáforas del propio cine? El cine como ladrón que roba las vidas ajenas, Following; el cine como manipulación de la memoria, Memento; el cine como magia, The Prestige, y, finalmente, el cine como fábrica de sueños, Origen. De hecho, sus películas sobre Batman podrían verse como su aportación al cine como espectáculo industrial de masas, pero yo creo que en ese terreno no ha alcanzado la pericia técnica que, por ejemplo, le sobra a Mathew Vaughn y ese es el único defecto que yo le veo a Origen, pero queda paliado por el apasionante montaje paralelo de cuatro escenas simultáneas durante el clímax final de la película.




TOY STORY 3 (Lee Unkrich)
A la calidad habitual en Pixar se une la carga emocional que aportan unos personajes entrañables con los que todos hemos ido creciendo, así que no se les puede pedir más. Bueno, eso no es más que una frase hecha así que: "más, por favor, seguid dándonos más".


Nota: Sí, lo que ven en la foto es la estantería que soporta gran parte de mi colección de películas. Necesitaba a un par de buenos vigilantes y ya los tengo. 




UN PROFETA (Jacques Audiard)
El director de la magnífica De Latir Mi Corazón Se Ha Parado aumenta y perfecciona los logros de su anterior filmografía para ofrecer uno de los grandes films europeos de la pasada década. Ya no estamos ante una gran promesa, sino ante uno de los grandes del viejo continente. El polar (cine negro a la francesa) tiene en Audiard a un gran heredero que respeta la tradición a la vez que aporta su propia personalidad  y un gusto muy moderno por la mezcla indiscriminada de géneros. Aquí hasta se permite un toque fantástico en forma de muerto que se aparece a su asesino, que me recordó a Un hombre lobo americano en Londres, aunque no sé si es un guiño intencionado. 




LA RED SOCIAL (David Fincher & Aaron Sorkin)
Como pueden ver, he decidido que David Fincher y Aaron Sorkin figuren juntos como autores del film, ya que en este caso el sello del creador de West Wing está tan presente como el del director de Zodiac, si no más. Es algo que he podido constatar viendo los extras del DVD, donde se hace patente la presencia permanente de Sorkin tanto en los ensayos como a lo largo del rodaje. La escena de apertura no puede ser más Sorkin: un diálogo a 100 por hora plagado de matices e información relevante que sienta las bases temáticas y el ritmo endiablado que va a marcar el resto del metraje. La vieja máxima de Cecille B. DeMille  ("una película debe empezar como un terremoto e ir hacia arriba") aplicada a un cine de autor cargado de contenido.

2 comentarios:

Licantropunk dijo...

Lo que más me ha gustado de esta entrada tuya, tanto tiempo esperada, es darme cuenta de que tampoco me he perdido tantas películas del año pasado como yo pensaba, aunque, por supuesto, no he visto ni la mitad que tú. De las reguleras me quedé con ganas de ver "Tamara Drewe" o "Fish Tank". "Nine", nothing. "Biutiful" o "Carancho" es de lo peor que vi. De las interesantes me gustaría ver "Un tipo serio", "Fantastic Mr. Fox", "Airdoll", "El americano" o "El gran Vázquez". "La cinta blanca", "Buried" o "En tierra hostil" las subiría un peldaño y "Balada triste... " la mandaría a la m... por decepcionarme tanto. En cuanto a las favoritas las he visto todas ellas, todas magníficas ("Kick ass" me gustó más el cómic, je, je, pero tienes razón en que está muy bien adaptado a la pantalla), menos "La red social", de la que yo esperaba más Fincher y menos Sorkin (sí, me he visto "El ala oeste", una temporada tras otra, por las noches, dándole el biberón al pequeño): más cine y menos televisión. Por cierto, ¿no te parece que Jesse Eisenberg hace el mismo personaje en "La red social" y en "Zombieland"? Verborrea incontenible, je, je.
Saludos y que esto siga en marcha, por favor.

DECKARD dijo...

Lo de Jesse Eisenberg es cierto, pero es que lo ves en las entrevistas del DVD y es igual que los personajes que interpreta. Resulta un poco repelente, la verdad.

Gracias por el comment, un saludo!