
La mejor definición que se podía hacer sobre “Little children” ya la ha hecho Sergi Sánchez en las páginas de Fotogramas: “Intenta ser Todd Solondtz y se queda en Sam Mendes”. Es decir, Todd Field intenta hacer “Happiness” y se queda en “American Beauty”. Bueno, en mi opinión no llega ni a eso porque, al menos, aquella contaba con una magistral interpretación de Kevin Spacey y una gran fotografía de Conrad L. Hall. Además, se puede decir que fue una pionera, ya que su éxito dio inicio a una moda de películas sobre las insatisfacciones y crisis de los habitantes de las aparentemente paradisiacas zonas residenciales norteamericanas. Moda que también ha llegado a la televisión, ver “Mujeres desesperadas”. Ese es quizá el primer problema de “Little children”, la sensación de ya visto que embarga al espectador. Y eso que el inicio es prometedor, con ese tono como de cuento y esa fascinante escena del beso en el parque que propicia todo lo que viene a continuación, pero la suavidad con la que se retrata a los personajes acaba inclinando la balanza hacia la indiferencia. Luego está esa manía, muy a lo “Crash” (la de Haggis, no la de Cronenberg), de proporcionar una oportunidad para la redención a los personajes más controvertidos de la función. Abel Ferrara o Paul Schrader podrían haberles dado un par de lecciones sobre personajes realmente difíciles de redimir, que vean, si no, “Bad Lieutenant”, “The funeral”, “American Gigoló” o “Posibilidad de escape”. En el fondo, Todd Field y Tom Perrotta (autores del guión) se cuidan de que la sangre no llegue al río a la hora de retratar a su fascista de "chichinabo" interpretado con eficacia por Noah Emmerich y a su psicópata sexual light (solo se le acusa de practicar exhibicionismo frente a unos niños, no de violación ni de actos violentos, y mantiene una relación entrañable con su madre) encarnado en Jackie Earle Haley (un gran acierto de casting que le ha valido una nominación al Oscar) con vistas a su futura redención. Aún así, resulta forzada y poco creíble. Ponga un pervertido en su vida, no se arrepentirá, parece la conclusión final de esa historia. Mientras tanto, veremos como los personajes aparentemente idealistas y rebeldes no lo son tanto como para renunciar a lo que ya tienen. Un final conformista, muy acorde con una película en la que siempre parece que va a pasar algo muy gordo (mantiene la tensión y tiene un ritmo absorbente), pero en la que finalmente no pasa nada especialmente destacable. Quizá ese sea el sentido final del filme: así es la vida, la sociedad conservadora y retrógrada acaba triunfando sobre el individuo. Los sueños deben quedar, por tanto, en el terreno de la ficción (se menciona expresamente “Madame Bobary” y el marido de Kate Winslett le pone “virtualmente” los cuernos a su mujer con una estrella erótica de Internet). No está nada mal la idea, pero para hacerla funcionar tendrían que haber puesto más carne en el asador; y no me refiero a la de Kate Winslett, precisamente.
3 comentarios:
Ain, que putada! como bien sabe acudo a las sesiones filmicas extrañamente acompañado a veces. Little Children me la tenía reservada para mi, pero leído lo leído.. me creo del todo lo leído y me parece que paso. "Gracias" y "eres un cabrón" a partes iguales, Deckard. Un saludo.
Pero Deckard, también comentamos que el final en el fondo era muy valiente porque lo bonito es que se hubieran decidido a ser felices y no a la estabilidad económica, que es lo que realmente eligen. Prefieren vivir tranquilos y no romper lo que ya quedará en la categoría del amor físico y perfecto, en lugar de sus vidas imperfectas. En cualquier otra peli más convencional hubieran escapado juntos y hubieran comido felices sus perdices. Y nos hubieran escatimado sus peleas, sus malos rollos de pareja. De nueva pareja.
Chewie: sé que le gustaron mucho "American beauty" y "Hapiness", así que creo que esta le dejaría más bien indiferente.
Selma: claro, por eso digo que la idea no está mal. Se puede interpretar como un final conformista, pero también más cercano a lo que sería la realidad de los personajes. Lo que pasa es que no acaba de funcionar porque antes no han puesto todo lo que hay que poner y además resulta algo forzado.
Un saludo a ambos!
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